El último Minutero
El Parque Rodó en la ciudad de Montevideo es un espacio urbano lleno de árboles de diferentes lugares del mundo, hay un lago por el que navegan botecitos impulsados a pedal. En lo profundo de este lugar, se encuentra un fotógrafo con su cámara de cajón y su trípode para fotografiar al paseante como ocurría en otras épocas en muchos lugares públicos.
El padre de Manuelian vino de Armenia y se dedicó a la fotografía. Dice que hace 54 años saca fotos en el Parque Rodó.Su cámara es minutera. Una caja oscura con óptica que fija la imagen en papel fotográfico que debe ser revelado dentro mismo de la cámara con químicos. Asi Manuel obtiene el negativo que debe fotografiar para obtener ahora si el positivo para el cliente.
Una de las cosas que me cautivan de todo esto es la instantaneidad del proceso y entrega. Por eso se llamaban cámaras minuteras. Si bien existe un discurso constante de la industria fotográfica de lo rápido y fácil de la fotografía actual (cual fuera).
La rapidez de obtener una imagen y obtener un objeto (hoja con sales de plata expuesta revelada y fijada) parece haber sido resuelta hace muchos años. Pero podemos fotografiarnos en el parque con nuestro teléfono o cámara digital, sin involucrarnos con terceros, en color, gratis. Veremos la fotos en menos de un minuto, podremos hacer muchas de ellas hasta que la careta nos convezca. La compartiremos con millones.
La cuestión sería establecer si los mundos desaparecen o solo se transforman. La fotografía es un buen objeto para analizar este enunciado.
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Nota sobre Manuelian Universidad ORT
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