Bueyes perdidos

Hay que sacar la foto de un toro de bronce porque la carne uruguaya es la mejor del mundo. Y ahí va el fotógrafo junto con Frederick al famoso monumento a "La Carreta", en el Parque Batlle.

Esta escultura fue realizada por José Leoncio Belloni en 1919. Hace unos años hice unas fotos del monumento en estado deplorable debido al robo sistemático de sus piezas de bronce para cambiar por dinero. Los cuernos y diferentes partes de la obra fueron aserrados por pasta baseros y amigos de lo ajeno que aprovechaban la falta de protección debido a un parque pensado en otra época donde la gente jamás hubiera robado bronce para cambiar en una casa de ventas de metales.

Por suerte el monumento ha sido reparado, vaya a saber cuál fue su costo, me imagino que mucho dinero. Pero el peligro ahora es otro.

Intentaba sacar una buena foto luego que el cuida parque  desconectó por un segundo la alarma que rodea la carreta, mi amigo Frederick hablaba con el joven que tiene la cabina pegado al monumento. Después de la sesión con los toros nos fuimos en el auto y Frederick me contó que el sueldo del cuida parque se lo paga el dueño de Azabache, un boliche que está cerca de ahí. Al parecer la alarma no es para los ladrones ocasionales o pasta baseros necesitados sino para los nuevos enemigos de los monumentos, los turistas.  Estos enamorados de los viajes se suben a la carreta y a los toros para sacarse fotos y si encuentran alguna pieza floja intentan llevarse un suvenir gratis.